Los estudios que favorecen al cigarro electrónico

Como se trata de que el testimonio no sea sospechoso de parcialidad, nos vamos hasta Sudáfrica. Más concretamente hasta Cuidad del Cabo. Allí, se ha realizado un estudio en el que han participado 349 fumadores.

Habiendo mostrado su intención de deshabituarse, se les ofreció la alternativa de “” en lugar de fumar. El resultado fue abrumador: al cabo de 2 meses, un 45% había abandonado el hábito.

El tratamiento de mayor efectividad probada

Hasta tal punto se ha mostrado efectivo el e-cig que Cifford Hulley, médico participante en la prueba afirmaba: “un e-cigarrillo es el método de tratamiento más efectivo en el mercado para dejar de fumar tabaco”.

Por su parte, el profesor Martin Weller, Jefe de Cirugía Vascular en la Universidad de Witwatersrand, comenta: “Motivado por la experiencia de mi esposa, que fumaba cigarrillos tradicionales en gran medida hasta el momento en que los reemplazó con los cigarrillos electrónicos, he aconsejado a mis pacientes que consideren e-cigarrillos como una fuente alternativa de nicotina”.

Los datos son abrumadores

Pero, aparte del enorme porcentaje de éxito, comparado con otros métodos, aparte de los testimonios de los encargados del estudio, el experimento arroja otros números espectaculares.

El 52% de los pacientes -más, por lo tanto de los que lograron deshabituarse por completo-, afirmó haber experimentado sensación de mayor energía, así como la mejora de su aspecto físico.

El e-cig sustituye a todos los factores de la adicción

Por otra parte, cuando se les preguntó a los sujetos de la investigación por qué se les hacía especialmente difícil dejar de fumar, un 49% hablaban de deseos de fumar; un 24% del hábito los gestos; y un 27% por la combinación de adicción física, gestos y sabor.

Cuando se les preguntó a los médicos, tras el experimento, si el cigarrillo electrónico podía ser un agente decisivo para abandonar el hábito de fumar, la respuesta fue un claro y unánime “sí”.